APUNTE BIOGRAFICO
Antonio María Esquivel
Antonio María Esquivel, nació en Sevilla en 1806. Comenzó los estudios de pintura en la Academia de Bellas Artes de Sevilla. Allí se familiarizó con la técnica pictórica y el detallismo al estilo de Murillo.
En 1831, se trasladó a Madrid, donde concursó en la Academia de San Fernando, siendo nombrado académico de mérito. En contacto con el ambiente intelectual madrileño de esos años, participó activamente en la fundación del Liceo Artístico y Literario en 1837, donde daría clases de Anatomía, asignatura que impartiría también más tarde en la Academia de San Fernando.
En 1839, otra vez en Sevilla, sufrió una enfermedad que le dejó prácticamente ciego; el artista, sumido en una profunda depresión, se intentó suicidar arrojándose al río Guadalquivir. Enterados sus compañeros y amigos poetas y artistas y movilizados por el Liceo para ayudarle, sufragaron entre todos un caro tratamiento realizado por un prestigioso oftalmólogo francés. Gracias a esto, en 1840 sanó y recuperó la visión. El artista, agradecido, pintó a sus amigos, poetas y pintores del Romanticismo, en un cuadro que se ha hecho justamente célebre. Como reconocimientos oficiales, recibió la placa del Sitio de Cádiz y fue nombrado comendador de la Orden de Isabel la Católica.
En 1843 es nombrado Pintor de Cámara y en 1847 académico de San Fernando, siendo además miembro fundador de la Sociedad Protectora de Bellas Artes. Como teórico de la pintura, redactó un Tratado de Anatomía Pictórica, cuyo original se guarda en el Museo del Prado. Falleció en Madrid en 1857.
Sus hijos Carlos María (1830-1867) y Vicente también fueron pintores.